El lipedema es una enfermedad inflamatoria crónica en la que se da una acumulación de las células grasas que afectan al tejido subcutáneo, siendo más frecuente esta acumulación en algunas zonas del cuerpo. Es en estas zonas donde se presenta resistencia a disminuir la acumulación de grasa que en condiciones normales, sí se lograría disminuir con dieta y ejercicio. El lipedema se asocia a la presencia de edema, sensibilidad y dolor, produciéndose problemas en la vascularización y drenaje venoso. Se diferencia del linfedema en que éste último se produce por una obstrucción o incorrecto funcionamiento de los canales linfáticos, produciéndose una acumulación de líquido linfático en el tejido subcutáneo. Es necesario hacer un correcto diagnóstico diferencial del lipedema diferenciándolo de casos de obesidad, linfedema y lipohipertrofia.
Desde la fisioterapia, los tratamientos que con más frecuencia se aplican a este tipo de circunstancias están el drenaje manual, vendaje compresivo y en algunos casos presoterapia. Dado que las consecuencias de esta patología pueden afectar a las relaciones, hábitos y vida cotidiana de las personas que la padecen, se aconseja que el abordaje sea multidisciplinar, participando también en el tratamiento médico y nutricionista.