BLOG

04/May/2016

     Una de las razones que comúnmente llevan a acudir al fisioterapeuta a las personas que realizan con frecuencia algún tipo de práctica deportiva son las roturas fibrilares. A pesar de que puedan parecer de menor complejidad que otro tipo de molestias o lesiones, es importante tanto su correcto diagnóstico como tratamiento, ya que tanto el ritmo de recuperación como la reincorporación a la actividad deportiva y rutinas de la vida diaria van a depender en gran parte de los mismos.

      En primer lugar, es elemental realizar un correcto diagnóstico diferencial, desechando la posibilidad de que se trate de una molestia menor como una distensión o una contractura muscular. Para ello, además de la observación, entrevista diagnóstica y exploración se suele emplear también una ecografía. Por lo general, la rotura fibrilar cursa con dolor focalizado, aunque dependiendo del grado con el que se presente ésta, pueden también aparecer un hematoma producto de una hemorragia interna e incluso mareo o sudor frío.

       Las roturas fibrilares pueden presentarse en cualquier zona muscular, pero se dan con mayor frecuencia en aquellas áreas relacionadas con una mayor actividad durante la práctica deportiva. Normalmente suelen aparecer porque esa zona se encontraba más vulnerable debido a otra lesión previa, como resultado de una carga en exceso, estiramientos bruscos, fatiga excesiva, golpes o incluso caídas.

       La duración del proceso de rehabilitación es variable, ya que inciden diversos factores en él ( edad, peso, seguimiento de recomendaciones, tamaño de la rotura…) pero en líneas generales el proceso de recuperación dura entre 8-10 días cuando se trata de una rotura de grado 1, de 3 a 4 semanas cuando es moderada ( grado 2) y de 1-3 meses cuando es grave o denominada grado 3.

       Entre las medidas que se suelen incluir en los programas de rehabilitación de este tipo de lesión encontramos la aplicación de frío, reposo, masaje drenante, movilización pasiva suave, vendaje, estiramientos de diferente intensidad o ejercicios de readaptación de carga, cuya aplicación irán variando a medida que va evolucionando la recuperación, y siempre ajustándose a las características propias que presenta la persona.

      Cualquier persona, haya presentado en alguna ocasión o no una rotura fibrilar, está expuesta a la posibilidad de ello, es por eso por lo que se recomienda a modo de prevención que se realicen ejercicios de estiramiento y calentamiento previos y posteriores a la exposición de un esfuerzo o actividad física considerables.

 

 

 

 


pic-team-8.jpg
03/May/2016

             En el ámbito de la salud, se podría decir que la variedad y cantidad de manuales diagnósticos, tratamientos y recomendaciones sobre alternativas para alcanzar una vida más saludable rozan casi la infinidad, pero sin embargo, a pesar de ello a veces los elementos que se pretenden emplear terminan cayendo en la generalidad y olvidando que no existe una única respuesta o solución que pueda venir bien a todos.

              Incluso, aquello que en un momento pudo ser de utilidad para mejorar el estado de salud de una persona, puede que no le funcione en otro momento dadas las circunstancias biológicas o personales, es por ello que es esencial ajustar las alternativas y abordaje de las molestias a la edad, peso, área lesionada, disposición/ actitud ante la rehabilitación, funcionalidad… que posea la persona y no sólo a la patología que pudiera presentarse. Para que en definitiva, aunque el destino que se desea alcanzar sea el mismo, cada persona requiere de tomar su propio camino, y lo más importante , de aprender a conocer cual es su propio ritmo y limitaciones.


kid-2.jpg
29/Abr/2016

       Con frecuencia, ante lesiones como las fracturas o luxaciones, se da la prescripción de prolongados periodos de inmovilización, que aunque por una parte son necesarios para la recuperación de la mencionada lesión, por otra, sin las recomendaciones fisioterapeúticas específicas, pueden repercutir negativamente sobre otros aspectos de la salud relacionados con el área dañada, traduciéndose en un mayor tiempo de convalecencia, además de un incremento de la pérdida temporal de la funcionalidad y autonomía personales. Es por ello que se recomienda pedir asesoramiento al profesional de la fisioterapia para prevenir o minimizar ciertos cambios en el tejido conjuntivo, fruto de la inmovilización, y de este modo facilitar el proceso de recuperación y reincorporación a las actividades de la vida diaria.

     Entre algunos de los cambios que se producen en el tejido conjuntivo ( los cuales suponen el sostén e integración del organismo) como consecuencia de la inmovilización son :

   -Reduccción de la fuerza en los ligamentos, tendones y músculos.

   -Debilitamiento de las uniones entre músculos y ligamentos

   -Reducción del líquido sinovial

   -Desgaste de los cartílagos.

   -Pérdida de Propiocepción.

   -Desorganización de las fibras

  -Acumulación de tejido adiposo fibroso hacia el espacio articular

    Las modificaciones o complicaciones pueden surgir a nivel local, regional o general, y dependiendo de las condiciones de salud pueden darse pérdidas de tono muscular y masa ósea considerables asociadas a la situación . En función de la periodicidad de la inmovilización, el estado general que presente la persona y la presencia de posibles patologías inherentes al motivo de la inmovilización, las recomendaciones fisioterapeúticas han de personalizarse.    Aunque puedan presentar elementos comunes entre ellas, como la realización de ejercicios isométricos, estimulación eléctrica, ejercicios dinámicos, estiramientos, entrenamiento postural… han de ser supervisadas y reajustadas de forma continuada por un fisioterapeuta en función de la evolución, ya que incluso tratándose de la misma persona, las consecuencias de distintas inmovilizaciones pueden variar en función del momento vital, contexto y estado de salud general que se posea.

 

 


27/Abr/2016

    Hoy Día 27 de Abril se celebra el Día Nacional de la Fibrosis Quística. A menudo el nombre de esta patología resulta familiar, sin embargo suele ser más desconocida la influencia que las sesiones y pautas de fisioterapia respiratoria pueden generar en la persona que la presenta, incidiendo considerablemente en las condiciones físicas y ritmo de actividad diaria. En la jornada de hoy nos sumamos a la causa, para que la unión entre fisioterapia y fibrosis quística sirva para transformar una etiqueta  en  calidad de vida.


23/Mar/2016

Comienzan algunos días festivos, y nos gustaría recordaros la importancia para la evolución del tratamiento de continuar con las recomendaciones del fisioterapeuta en casa. Generalmente los ejercicios a realizar no requieren de material adicional, no ocupan sitio en el equipaje y pueden combinarse con la música o lugares según cada gusto, pero lo más importante de ello es recordar que pararse a dedicar unos minutos diarios a uno mismo puede beneficiar considerablemente la calidad de vida y funcionalidad en el futuro.

Les deseamos que disfruten de estos días festivos.

Equipo Profesional de Domofisio.


logo footer white

Centro de Fisioterapia y Rehabilitación, ubicado en el centro de Sevilla, especializado en el tratamiento individual a través de la terapia manual

Post recientes

Powered by EDO Estudio. 2021. Domofisio © All rights reserved.

× ¿Cómo puedo ayudarte?